lunes, 21 de noviembre de 2011

AÚN DEAMBULO EN ÉSTE MUNDO

Hola amigos; en verdad es conmovedor y muy aleccionador lo que comentan y se los agradezco de corazón. aún no me recupero bien de ésta arrastrada que me dió la vida y en la cual me ha dejado tocado para recibir una muerte segura e inexorable, espero que eso lleve mucho más tiempo del que creo y me preparo mental y físicamente para esa lucha que durará el resto de mi existencia.


Nuevamente me disculpo por mi ausencia, que se debió primero a mi depresión suicida en la que pasé ideando muchas formas diferentes de autoexterminarme despues de contratar un seguro de vida, y en la cual por asistencia de un amigo médico decidí que sería una sobredosis de morfina.


Después se debió a mi cobardía para llevarlo a cabo y por no causar dolor a personas que me quieren.


Después se debió a ésta maldita afección nerviosa que casi me inutilizó el brazo derecho y de la cual apenas me voy recuperando.


Apenas salí de esa blog-catatonía en atención a una muy querida amiga mía, ella es Mary, quien me pidió que escribiera un testimonio de que estoy al menos vivo; ella forma parte de la hermandad de los mosqueteros, de la cual me siento orgulloso de pertenecer junto con mis otros dos hermanos.


Mary he aqui mi palabra cumplida.


Amigos también pido me perdonen por no dirigirme a cada uno en especial en ésta ocasión, porque todos son especiales para mí, pero la mente y la carne aún no están dispuestas para reanudar el camino, pero sepan que los quiero a todos y que espero volver pronto y dedicarle a cada uno el merecido reconocimiento por su solidaridad con éste desconocido al que le han permitido atisbar un poco de sus vidas y al que han obsequiado con su tiempo y sus lecturas.


He de romper con algunos paradigmas, y he de enmendar errores, y he de pedir perdón a más de uno de ustedes para poder continuar avante, y doy mi palabra de que en su momento lo haré.


Posiblemente romper con esos paradigmas incluya cerrar éste blog y abrir otro con un nombre y un direccionamiento un poco distinto; si ello sucede sería un verdadero honor que me regalaran con su visita en esa otra casa que abrirá sus puertas para ustedes.

Sinceramente.
Rafael.